Stallone tiene en su haber personajes icónicos, pero este Samaritano no estará entre ellos, aunque con el tiempo, siempre se podrá decir que, en la época en la que los superhéroes estuvieron al alza, el que fuera Rambo, se apuntó a la moda con una película de serie B estrenada en Streaming, cargada de tópicos, referencias a los 80's (véase la máquina arcade de Robocop) y con unos efectos especiales de segunda categoría, y aún así sabiendo defender a un héroe de cómic con algo de blanda moral para distinguir el bien del mal viendo que, a veces la línea es demasiado delgada.
A estas alturas a Stallone no se le puede reprochar casi nada en todo lo que se refiera a entretener mediante el vínculo de la acción, pero exceptuando al inspirador niño de la cinta, todo lo que rodea a Samaritan flaquea, la historia bastante tópica (con referencias a El Protegido), el villano descafeinado y fanfarrón, y el ritmo algo apagado en su transcurso, pero ahí está el potro italiano de nuevo, adiestrando a la juventud para ir por el buen camino , y de paso repartir golpetazos que mandan a los villanos a 100 metros, machacar cabezas y romperles los huesos.
Se echa de menos una mayor profundidad al film pero Samaritan cumple, entretiene, divierte, y aunque no hay un giro final sorprendente, la ambientación ochentera y los mamporros dejan un leve buen sabor de boca. Stallone está mayor, no hay duda, pero aún le queda historia de la acción por contar (incluso con superhéroes de por medio).
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